Existen varias formas anticuadas de hacer frente a las chinches. Entre las soluciones más comunes, muchos consideran que el alcohol metílico es una buena opción. Pero, ¿es realmente una solución eficaz para acabar con las chinches? En este artículo lo analizamos en profundidad.
La respuesta en pocas palabras
- El alcohol metílico es un insecticida temporal, pero no es eficaz a largo plazo contra las chinches.
- Su uso como insecticida es perjudicial para la salud y peligroso para la seguridad de su hogar.
- Existen algunas alternativas naturales interesantes contra las chinches.
Alcohol metílico: eficacia limitada contra las chinches de la cama
El alcohol metílico, también conocido comoalcohol isopropílico, es un producto utilizado habitualmente para limpiar y desinfectar diversas superficies. Tiene propiedades antimicrobianas y puede matar ciertos insectos cuando se aplica directamente sobre ellos. Sin embargo, cuando se trata de chinches, su eficacia es limitada.
El alcohol de uso doméstico puede matar chinches al contacto, ya que actúa secando sus cuerpos y alterando su capacidad para retener la humedad. Sin embargo, las chinches suelen ser muy pequeñas y se esconden en lugares de difícil acceso, como grietas, hendiduras y colchones. Por lo tanto, es difícil aplicar alcohol metílico directamente a todos los chinches presentes en una infestación.
Además, el alcohol isopropílico se evapora rápidamente, por lo que pierde su efecto al cabo de unos instantes. Los chinches pueden moverse rápidamente y esconderse en otros lugares antes de que el alcohol pueda alcanzarlos eficazmente.
Riesgo de reinfestación
Este tipo de alcohol doméstico no mata los huevos de chinche. Los huevos son resistentes y a menudo requieren tratamientos específicos para eliminarlos por completo. Si sólo utiliza alcohol isopropílico para frotar, los huevos pueden eclosionar más tarde y la infestación puede persistir.
Además, los intentos repetidos de eliminar las chinches con alcohol isopropílico pueden incluso hacer que los insectos se vuelvan más resistentes.
Alcohol isopropílico: uso arriesgado como insecticida
El uso de alcohol isopropílico como insecticida presenta importantes riesgos para la salud y la seguridad.
Producto inflamable y con riesgo de incendio
Como su nombre indica, el alcohol metílico es inflamable y debe utilizarse con precaución. Este producto químico es extremadamente volátil y puede incendiarse con facilidad, sobre todo si se utiliza en grandes cantidades en espacios cerrados.
Aplicar alcohol isopropílico a colchones, muebles u otras zonas infestadas de chinches supone un riesgo de incendio importante, sobre todo en presencia de otras fuentes de calor como cigarrillos, velas o aparatos eléctricos.
Asegúrese de seguir las instrucciones de seguridad cuando utilice este producto.
Un producto tóxico
Además, el alcohol metílico es tóxico. Contiene entre un 5 y un 10% de metanol, que es extremadamente peligroso para la salud si se inhala, ingiere o absorbe a través de la piel.
Cuando se vaporizan en una habitación, los vapores del alcohol pueden provocar dolores de cabeza, mareos, náuseas y, en algunos casos, problemas respiratorios. Una exposición prolongada o repetida puede incluso provocar complicaciones más graves, como daños pulmonares o intoxicación.
Los niños y las personas frágiles son especialmente vulnerables a estos efectos tóxicos.
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Bonus: 3 alternativas naturales contra las chinches de la cama
He aquí tres alternativas naturales para las abuelas que pueden ayudarle a deshacerse de las chinches sin poner en peligro su salud ni su seguridad.
1. Tierra de diatomeas
La tierra de diatomeas es un polvo fino formado por fósiles microscópicos de algas. Es un insecticida natural utilizado a menudo para tratar chinches. Actúa deshidratando a las chinches cuando entran en contacto con el polvo. Destruye su caparazón exterior, las seca y las mata en pocos días. Para utilizar tierra de diatomeas, espolvoréela en las zonas infestadas, como grietas, zócalos y alrededor de la cama. Es segura para personas y animales, siempre que se utilice tierra de diatomeas de calidad alimentaria, y sigue siendo eficaz mientras esté seca.
Es bueno saberlo: la tierra de Sommières también es eficaz contra las chinches.
2. Aceites esenciales (lavanda y árbol del té)
Algunos aceites esenciales, como el aceite de lavanda, el aceite de árbol de té o el aceite de clavo, son famosos por sus propiedades insecticidas. Pueden utilizarse como repelentes naturales de chinches. Para utilizarlos, mezcle unas gotas de aceite esencial con agua en un pulverizador y aplique la mezcla en las zonas infestadas, como colchones, sábanas y muebles. El aceite de lavanda tiene un efecto calmante y también puede ayudar a repeler las chinches, mientras que el aceite de árbol de té es conocido por sus propiedades antimicrobianas e insecticidas.
Sin embargo, tenga en cuenta que los aceites esenciales no bastan para erradicar por completo una infestación de chinches.
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3. Bicarbonato de sodio
El bicarbonato sódico es otra solución natural muy utilizada para combatir las chinches. Funciona de forma similar a la tierra de diatomeas, deshidratando a los insectos que entran en contacto directo con él. Espolvoree bicarbonato sódico en los lugares donde se esconden las chinches, como las costuras de los colchones, los recovecos de los muebles y las grietas de las paredes. Al cabo de unos días, aspira los residuos y repite la operación.
Para tratar las chinches de la cama, recomendamos utilizar productos eficaces y específicos como Sereni-d®. Nuestra gama elimina eficazmente las chinches en todas las fases de desarrollo, incluidos los huevos. En caso de infestación importante, puede recurrir a un profesional.